También las plantas medicinales nos nutren. ¿Quién no ha comido alguna vez un exquisito guiso con borraja? Algunos nombres que la cultura popular ha dado a esta planta son llamativos, como lengua de buey, flores cordiales o alcohelo.
Planta medicinal de la Borraja: descripción
Aunque su origen nos lleva a Siria y Egipto, se considera autóctona de toda la zona mediterránea y por otra parte, la puedes encontrar en áreas templadas de la mitad norte del planeta.
Su ciclo es anual y alcanza los 60 centímetros de altura. Con tallos vellosos, gruesos y huecos, que crecen rectos y en forma de ramo, son verduras de hoja verde con un alto contenido en vitaminas y minerales, sobre todo hierro, sodio y potasio.
Fácilmente cultivable, se recolecta en otoño aunque, con fines terapéuticos, las hojas se recogen en primavera y las flores, de color azul y con forma de estrella, cuando están bien abiertas.
Borraja (Borrago officinalis), usos y propiedades
- Diurética. Las flores y hojas en infusión facilitan la eliminación de toxinas a través de la orina, por lo que se recomienda en tratamientos de obesidad, así como en casos de enfermedades reumáticas y hepáticas.
- Antitusiva y expectorante. Sus mucílagos y flavonoides ayudan a combatir la tos, resfriados, bronquitis o anginas.
- Antiinflamatoria. Su aceite contiene ácidos grasos esenciales, utilizados para tratar la artritis, calmar el dolor producido por un golpe o mejorar los problemas de la piel.
- Estimulante. Equilibra las glándulas suprarrenales, por lo que resulta efectiva ante síntomas de estrés. Regula el ciclo menstrual. Aunque incrementa la secreción láctea, no tomes sus hojas ni el aceite si estás embarazada o lactando, ya que contienen alcaloides y podrías afectar al bebé.
- Vasodilatadora. Su aceite mejora la circulación, por lo que previene de varices, hemorroides o tensión arterial alta y ayuda a reducir el colesterol.
Además, puedes consumir estas plantas medicinales como parte de una dieta de adelgazamiento.